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La guerra de nunca acabar
Parece que finalmente empezó una nueva guerra de navegadores (ya he perdido la cuenta, no sé si es la tercera, o la cuarta), lo cual es divertido para aquellos que están involucrados en el tema, y es beneficioso para los usuarios (esa tontería de la competencia que no entienden muy bien los de microsoft).
Si bien yo creo que nunca terminó esta guerra, a lo sumo hubo un pequeño período de tregua (más no de paz), ahora revivimos un nuevo recrudecimiento de los enfrentamientos. Microsoft empezaba su particular batalla hace dos semanas proclamando que su nuevo navegador era más rápido que Firefox 3 (no las betas) y que Chrome (en su versión final en Windows). Y si bien las pruebas realizadas distaban bastante de ser «Objetivas», el resultado era el esperado. Mientras se colaba este chiste por la red, la empresa iba ejerciendo su poder de lobby en ciertas empresas, yendo personalmente a hablar de las bondades del nuevo navegador que va a respetar (finalmente) los estándares web. Ese lobby lo pudimos ver materializado en un artículo de El País, hablando de que Internet Explorer 8 va a ser «más intuitivo» (como si los otros navegadores no lo fueran ya).
En la compañía de la manzanita se apuraron a publicar una versión beta de su nuevo Safari 4, que promete y mucho. Mayor integración con lo que será Snow Leopard, mejoras para aprovecharse de las nuevas especificaciones de los nuevos Mac (aprovechando el procesador, aceleradores y tal), y nuevas características (algunas que podíamos calificar de «ideas prestadas» a Opera). A pesar de ser una beta (y que no recuerdo la beta de safari 3, como tampoco recuerdo que Microsoft haya publicado una versión beta de IE7), el navegador es lo suficientemente estable como para usarlo habitualmente.
Desde Mozilla se siguió el trabajo constante, como de costumbre, aunque a tenor de los hechos, decidieron atrasar el lanzamiento de Firefox 3.5 (antes conocido como 3.1), debido a que querían tener bien implementado el nuevo motor de JavaScript (básicamente quieren conseguir mayor velocidad). Esta es la versión resumida, digamos que el proceso de desarrollo de Mozilla es un poco más complicado, pero no por eso menos abierto. El RoadMap está visible para todos y las discusiones entre desarrolladores se pueden seguir en los google groups.
Por último tenemos al gigante Google, que finalmente está acercándose a los otros sistemas operativos. Aunque todavía no es una versión oficial ni definitiva (es una compilación hecha por un miembro de la comunidad de Mozilla-Hispano, basándose en una versión pre-alfa), los usuarios de Mac ya podemos disfrutar de Chromium, la versión maquera de Chrome. Un navegador que promete, pero que todavía le faltan muchas cosas por pulir. Preocupándose más por la velocidad que por otra cosa, se dejan muchas cosas y características que quizás serían de mayor agrado y la gente podría verlo con otros ojos.
Yo todavía me pregunto cómo puede ser que Safari no permita bloquear anuncios, ya que a pesar de que va más rápido que Firefox 3.5 beta 2, hay características básicas que no se incluyen. Chromium parece que por el momento tampoco va a incluir «extensiones» o «agregados», así que no espero una versión muy distinta a la que estoy probando. No es inestable, pero hay que agregar http:// a cada dirección, los sitios más visitados no funcionan, no se pueden agregar «Marcadores», y las pestañas no se cierran salvo por atajo de teclas.
Firefox también tendrá sus peros para aquellos que no están acostumbrados a usarlo (la crítica de que consume mucha memoria está quedando atrás, personalmente a mí nunca me sucedió, salvo por agregarle alguna extensión de dudosa utilidad), pero al menos su filosofía me atrae mucho más que las de las otras compañías. Además de que colaboro con la comunidad en español de manera activa, el trabajo de sus desarrolladores parece a los ojos del público mucho más transparente de lo que puede pasar con la gente de Apple o Google.
Para no dejar de ser un poco objetivo, a continuación van los resultados de las pruebas que hice esta mañana en mi Mac OS X 10.5.6 (obviamente IE 8 queda fuera de la prueba):
Firefox 3.5 Beta 2
Acid3 Test: 93/100 – SunSpider: 1952.4ms +/- 6.8%
Safari 4 Beta
Acid3 Test: 99/100 – SunSpider: 1678.4ms +/- 32.2%
Chromium (Pre-Alpha)
Acid3 Test: 100/100 – SunSpider: 956.0ms +/- 3.0%
Pruebenlos y saquen sus propias conclusiones. Vuelvo a insistir que los únicos beneficiados de toda esta «guerra» somos los usuarios.
Puede fallar
Ayer volvimos a ser víctimas de la google-dependencia. Esa manía por autoinmolarse al estar pendientes de un servicio por el que no pagamos nada y que nos ofrece muchas ventajas (o eso queremos creer). Si hace casi un mes, el problema era el sitio de búsqueda (que recordemos sólo estuvo caído una hora), ahora el problema «desconocido» sucedió con la interfaz web de su servicio de correo.
Es lógico tanto revuelo??, más de uno ironizó que en twitter se hacía mucho hincapié en el fallo (la dulce venganza twitteriana… si es que existe esa palabra). Los más afectados, creo yo, estuvieron del lado de aquellos que utilizan gmail para trabajar y no podían acceder desde sus ordenadores de trabajo (todavía hay empresas que desconocen para que sirve el software libre, así que no resulta raro que no sepan configurar un servicio de POP3 en un cliente de correo… cualquier cliente de correo).
Casualmente estoy leyendo un libro de Slavoj Zizek, un teórico que no sólo hizo más leña del árbol caído althusseriano, sino que se dedicó a explicar a Lacan para los más obtusos (yo creo que entendí a Lacan a partir de Zizek), que habla sobre la ideología. Él recoje la frase de Marx «Ellos no lo saben, pero lo hacen», y la transforma en que en realidad la gente, a pesar de que sabe de qué va el asunto, lo sigue haciendo y asumiendo como natural. El libro se llama «El sublime objeto de la ideología» y es bastante recomendable (aunque todavía no lo terminé de leer).
Da la casualidad que alzamos la voz y nos indignamos cuando Facebook pretende poseer nuestros datos de manera vitalicia, y no decimos nada sobre los servicios de Google (sabemos lo que hacen, y sin embargo seguimos utilizándolos). Sabemos que Google utiliza nuestros datos y que la publicidad que coloca estratégicamente en la parte derecha de la pantalla, es porque hay algo o alguien que «lee» nuestros mails y nos recomienda viajar a Tailandia (si es que hablamos mucho de vacaciones), o nos ofrece buscadores de vuelos baratos (si escribimos sobre nuestros viajes recientes). Y sin embargo, seguimos utilizando tan naturalmente sus servicios.
No digo que no hay que volver a utilizar Gmail (sería muy cínico de mi parte, ya que es mi cuenta principal… y espero que por este post no me la cancelen-bloqueen), pero hay que ser un poco más conscientes de ciertas cosas. Sabemos que son servicios gratuitos, que no nos piden nada a cambio (salvo que «revelemos» una serie de información privada y personal), así que no podemos pretender que sean perfectos. Hay una dependencia fetichista de nuestra parte, que no es perjudicial, salvo en estos casos.
Sólo cabe esperar que el próximo fallo no dure mucho más, ni sea más grave. Por las dudas no viene nunca mal tener una copia de respaldo de los correos. Google es humano (en el fondo), y no creo que éste sea el último error que veamos este año.
En todo caso, siempre viene bien pensar en alternativas para esos casos en que nos quedamos sin internet, o en este caso, sin gmail:
De chapuzeros y fantasmas
Nunca hay ánimo de empezar una pequeña trifulca virtual, sobre todo porque al ser uno dueño de su propio blog, puede borrar los comentarios que considere ofensivo a su persona. Pero como ya llega un punto en que a uno le cansa tanta crítica agresiva, toca responder… por más que no haya mejor desprecio que no hacer aprecio.
Las críticas siempre molestan, no hay porqué negarlo, pero uno siempre trata de ser lo más maduro posible. Asumir las críticas constructivas y tratar de encajar el obvio error de la mejor manera posible. Pero hay ciertos momentos en que las críticas absurdas, esas que acusan apuntando el dedo sin mirar los propios errores, joden.
Paso a relatar la situación. La semana pasada, hubo un problema con la actualización del diccionario español en Firefox y Thunderbird. La variante es-ES no reconocía ciertas palabras, o reconocía una palabra en masculino, pero la misma en femenino la marcaba como error (no, no somos tan machistas). Durante todo un día (y cuando digo todo, me refiero a varios correos dentro de la lista de traducción de NAVE), se trató de ver porqué se había colado ese problema. Varias personas intentaron solucionar lo más pronto posible el error ni bien se dieron cuenta (más allá de foros, twitteos u otros medios). Gente que en el momento en que surgió el error estaban durmiendo o trabajando, gente que sacó tiempo de donde no tenía para intentar solucionar el problema.
Entonces jode que una o dos personas desde su sitio web (en realidad desde un foro que dice ser comunitario, pero que en realidad es manejado por dos o tres individuos), se dediquen a señalar el error y ni siquiera aporten soluciones. Individuos que a lo único que se dedican es a marcar el error ajeno, sin mirar que más de una vez su servidor está caído y su web inaccesible por un error de la base de datos MySQL, o por un exceso de tráfico (les sucedió durante todo el día de la publicación de Firefox 3). Gente que desde su pequeño «pedestal» en wikipedia se dedica a borrar enlaces hacia MH, como si se tratase de un juego infantil.
En Mozilla-Hispano siempre tratamos de construir para la comunidad de Mozilla en español. Ya sabrán, o se imaginarán, lo que pienso del otro portal que se dice «La comunidad de Mozilla en español». La portada de MH últimamente puede que esté un poco atrasada con las noticias, pero siempre tratamos de producir artículos que no sean una mera traducción de Mozilla Developer News, tratamos de aportar nuestro punto de vista, un pequeño comentario, una idea. Animamos a los usuarios a sumarse, a aportar cosas (aunque no siempre fructifiquen), y tratamos de ayudar a desarrollar una verdadera comunidad de usuarios en español.
Quiero remarcar que esta es una opinión personal, y que en realidad ninguno de los chicos del proyecto saben que he escrito este artículo (aunque supongo que luego me dirán algo, o me enviarán mail y/o twitteo). Pero ya me parece que ha llegado un punto en que alguno de nosotros tiene que alzar un poco la voz y no masticar la bronca por dentro, porque por más que este blog lo lean 5 personas (o menos :P), uno tiene que decir basta cuando del otro lado se dedican a menospreciar lo que tanto esfuerzo cuesta.
La secuencia de los hechos la pueden leer en la página del proyecto NAVE, la retórica diplomática es culpa de Ricardo.
Por cierto, no voy a enlazar el foro donde se critica tan absurdamente el trabajo voluntario de unos pocos… para que no se les caiga el servidor por tener 3 visitas más de lo que les permite el hosting.
La hora que vivivimos en peligro
Para aquellos apocalípticos que estaban esperando ver una señal del fin del mundo, el pasado sábado tuvieron su momento de gloria cuando Google decidió volverse humano (quizás eso de endiosar al sitio de búsquedas por excelencia era tóxico). Para los paranoicos, el sábado seguramente pasaron una hora que podría asignarse a la categoría de pánico total.
No voy a entrar en los detalles del error (algo tan simple, que parece hasta tonto), pero es un signo de la dependencia de algunas cosas y elementos que hasta hace un par de años, no significaban nada. En la época en que vivimos, el consumismo que hay es (generalmente) virtual. Es crear una necesidad donde no la hay.
Por si alguien no se acuerda, hasta hace poco menos de 5 años, podías buscar sitios web y cosas por Yahoo!, Lycos, Altavista y muchas páginas más además de Google. Ahora mismo ya casi nadie utiliza la búsqueda de msn, y ni se acuerdan de la barra de AOL. Los tiempos cambian cada vez más rápido y si bien no ocurrió ningún desastre informático, lo que sucedió puede ser un anticipo de qué podría pasar si seguimos aumentando nuestra dependencia informática, en una sociedad donde el centro pasa cada vez más por Google y Youtube. Y eso que el incidente sólo duró una hora. A saber qué desastre económico se podría haber desencadenado si hubiera durado 3 horas de un martes.
Acquisition
Bien, siguiendo con la temática maquera (algo olvidada), ahora toca el turno de otra de las aplicaciones dentro de mi Mac.
Acquisition es una aplicación para descargar música, el típico cliente p2p (y que sus responsables no se hacen cargo si son canciones con copyright o no, simplemente te advierten que puedes estar infringiendo las leyes de propiedad intelectual). Para aquellos que en su momento nos acostumbramos a Napster, el funcionamiento es bastante similar. No he encontrado que se puedan descargar álbumes enteros, pero sí algunos vídeos y otro tipo de archivos que no necesariamente son .mp3. (más…)
MEME: Mis 10 aplicaciones Mac
Esto ha empezado en ThinkWasabi (o así dice Appleando), y se trata de poner las 10 aplicaciones más utilizadas en Mac. Al final va a terminar siendo un meme, mal que le pese a «Wasabi».
- Firefox (creo que no hay día que no lo utilice, tuneado o sin extensiones, es el mejor)
- NetNewsWire (potente lector de noticias que no era gratuito, pero ahora sí)
- Amsn (no puedo acostumbrarme al adium, ni al ichat)
- Thunderbird (la costumbre de usarlo en Linux y Windows, hace que me sea difícil usar Mail)
- iTunes (porque es el que viene por defecto, y para poder sincronizar el iPod)
- LastFM (descubro nuevas bandas cada día)
- VLC (imprescindible, reproduce todo)
- Pixelmator (para retocar fotos, evitando el Vista Previa)
- Onyx (para mantener sanita a la Mac)
- Vuze (ex Azureus, por esto pueden acusarme de pirata).
Y eso es todo por el momento. No son todas de software libre, pero al menos no hay casi ninguna de pago (salvo Pixelmator, que cuesta muchísimo menos que Photoshop).
Contaminación publicitaria
Es muy raro ver cómo la publicidad va mutando para convertirse en parte diaria de nuestra vida. Uno ya la acepta como parte de lo que ven nuestros ojos cuando vamos de camino a algún sitio. Nos acompañan para esperar el bus o el metro. Están presentes.
Pero lo que llama la atención, es cuando la publicidad empieza a invadir zonas que no suelen estar reservadas para ver un cartel o anuncio. Estos puntos generalmente se suelen denominar PNT (Publicidad No Tradicional), y suelen cubrir ese espacio por un período de tiempo menor al de un anuncio fijo o estático (por costes, o porque no están pensados para durar más de una semana).
No sé cómo se maneja el metro de Madrid para licitar sus espacios de publicidad, pero creo que no es el primer año que se puede ver una invasión visual de estas dimensiones. Me refiero a los anuncios de MediaMarkt (en la estación Goya) y de Menaje del hogar (estación Av. de América).
Pasillo de Av. de América
Probablemente los costos de imprimir en vinilo no sean muy altos… pero ¿cuántas empresas se pueden dar el lujo de insertar un anuncio de estas dimensiones y características en el transporte público?. Teniendo en cuenta que estamos en crisis, me pregunto cuánto durará esta campaña (supongo que será por todo diciembre, debido a sus características).
Lo que más llama la atención es hasta dónde se puede llegar en términos de compras de espacios. Por lo que pude ver, no hay otros anuncios de la competencia (que podrían «contaminar» la finalidad del anuncio). Así que el efecto es el ideal, aunque no así la segmentación del target.
Creo que el 2009 (crisis mediante) promete ser más invasivo en cuanto a publicidad se refiere. Es en esa época donde el ingenio creativo reluce más que la propuesta en sí. Aunque en este caso, el efecto termina siendo un agobio para los sentidos.
De navegadores y seguridades
Mucha gente identifica Internet con una E (no voy a poner el logo aquí). Mucha gente no sábe que Windows es un sistema operativo y que hay más de un sistema operativo. Mucha gente no sabe que no tiene que abrir archivos de gente desconocida (o a veces conocida), que terminen en un .exe. Mucha gente no utiliza un Firewall, o un anti-Spyware.
Ahora bien, todos deberíamos saber que no hay que usar Internet Explorer, en ninguna de sus versiones. Y no es apología de Firefox. Todos deberíamos leer la nota de El País, o por lo menos estar enterados mínimamente que el navegador de Microsoft, además de ser el que menos se preocupa por los estándares web, la seguridad de sus usuarios, y despreciar a la comunidad de software libre, es un peligro para cualquiera que quiera navegar tranquilamente por Internet.
También deberíamos ser conscientes que la gran novedad en el mundo de los navegadores, tampoco se salva. Google Chrome, que ha salido de beta hace menos de una semana, es el navegador que peor protege las contraseñas de sus usuarios.
Por eso, si estás utilizando Windows, utiliza cualquier otro navegador. Hay varios, y los que te voy a enlazar a continuación son todos gratis:
Tan sencillo como eso. Preocupate por tu seguridad en la red, tu información personal es más valiosa de lo que piensas.
Posteo inspirado por el blog de Asa Dotzler.
EasyListening
Vamos a ponernos un poco frikis y maqueros.
Aunque este blog no pretende ser tecnológico, ni una guía para switchers, he notado que para algunas aplicaciones de Mac OS X no hay muchos comentarios ni opiniones (ni en inglés ni en español, más allá de algún foro que dice: «sí, este programa esta bien para esto»).
Así que paso a comentar mi situación:
Tengo una MacBook de las de plastico blanco (que ahora parecen más feas que los nuevos modelos, pero funcionan casi igual y tienen el mismo sistema operativo), y un teléfono móvil Sony Ericsson W960i (un intento de competencia para el iPhone).
El problema es que el móvil tiene Symbian UIQ como sistema operativo, que si bien no es tan malo, no tiene tanto soporte y compatibilidad como si fuera un Nokia (debería haber investigado antes de comprar). Y si a eso le sumamos que el software que viene con el teléfono es sólo para Windows, pues como que no deja mucho margen.
Ni en Linux ni en Mac podía encontrar un programa que me sincronizara la música de iTunes en el dispositivo (salvo algunos scripts que no terminan nunca de funcionar bien), así que estuve investigando y encontré un programita bastante sencillo llamado EasyListening.
En su web claman que ofrecen compatibilidad con casi toda la gama de teléfonos Sony Ericsson, y es verdad. Así que decidí probarlo a ver qué tal iba, no sin antes leerme las preguntas frecuentes (más que preguntas son advertencias de que algunas cosas pueden fallar).
A la primera me reconoció el telefonito… pero el problema era que no me dejaba sincronizar más de una lista… y para colmo sólo me copiaba las 3 primeras canciones. Las típicas trampas de las aplicaciones que son de pago. Me fijé cuánto me iba a costar el chiste y al ser sólo 8 euros con algo (cuidado, hay trampa: cuando vas a comprar, te marca otra aplicación aparte que eleva la suma a 14 euros… así que están advertidos), decidí que valía la pena la inversión.
Las listas de iTunes las reconoció sin problemas, aunque aviso que si creas una lista mientras tienes abierto el programa, no aparece salvo que la arrastres a la ventana. La interfaz es muy sencilla, aunque todavía no entiendo porqué los dos botones (copiar y sincronizar) hacen exactamente lo mismo. La única advertencia que no me animé a desacatar fue que había que expulsar el móvil a través del programa, no del finder.
Pros: Uso muy fácil y simple, nada de preferencias complicadas. Reconoce todas las listas de iTunes (salvo las de iTunes Store). Sincroniza rápido. Es una aplicación liviana.
Contras: Es de pago (aunque de las aplicaciones más baratas para apple). No deja sincronizar los Podcast. No reproduce archivos con DRM (obviamente). Sólo está disponible en inglés y para móviles de Sony Ericsson.
No Lugar 
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